lunes, 6 de agosto de 2012

El RBS, un banco “nacionalizado” que manipula el Líbor


          

Junto al escándalo de Barclays, que – como relatamos en la anterior entrada de este blog -  ha admitido ante las autoridades estadounidenses y británicas su responsabilidad en la manipulación del Líbor, el tipo de interés básico de Londres, también ha reconocido su implicación el Royal Bank of Scotland (RBS), que está negociando un acuerdo con las autoridades con multa incluida según The Wall Street Journal (31/7/2012). Para colmo, en este caso de falseamiento del precio de referencia del mercado financiero londinense es un banco propiedad de los contribuyentes británicos. Una muestra más de que hay un  “problema sistémico” (solventes especialistas dixit) porque el RBS es uno de los 18 bancos que integran el panel que establece el Libor, el tipo de interés bancario de Londres para los préstamos en libras, dólares y ocho monedas más; y uno de  los bancos que contribuyen a fijar el Líbor en libras esterlinas; y que hasta hace poco participaba en los paneles de bancos que fijan los tipos de interés en Japón y Hong Kong.

Estas manipulaciones del tipo de interés de Londres y otras prácticas ilícitas comenzaron antes de su rescate en 2008, y siguieron tras la “nacionalización” del Royal Bank of Scotland por el Gobierno laborista de George Brown para evitar su quiebra, aunque la gestión continuó en manos de profesionales que mantuvieron sus prácticas ilícitas junto con su red de filiales en paraísos fiscales, como ya relate en otro libro; actualmente el 83 % de las acciones son del Estado británico.

Sin embargo, el gobierno británico parece haberse enterado ahora de cómo se establecía el Líbor y estudia alternativas que no se basen en las “propuestas” de un “club” de bancos para determinar cual es el tipo de interés practicado sino en los datos reales de las operaciones de préstamos interbancarios. Del mismo modo también ahora con el caso de Barclays, también la Comisión europea se apresuró a emitir un comunicado (25/7/2012) sobre “el escándalo del Líbor” anunciando como siempre una revisión de las correspondientes directivas para penalizar estos falseamientos de los mercados del dinero,  porque dado el paralelismo en el establecimiento del Líbor y el Euribor hay temores fundados que el tipo de interés del mercado interbancario de la zona del euro haya podido sufrir manipulaciones similares. Pero ni el Gobierno británico ni la  Comisión se han planteado en serio revisar el principio neoliberal de la autorregulación de los mercados financieros del euro y la libra, origen de todos las estafas financieras. Los grandes bancos no solo fijan libremente los precios de referencia sino que hacen trampas con esas reglas que ellos mismos han fijado.

Y es que la determinación de estos tipos medios del interés bancario efectivo aplicado, queda en manos de los bancos principales mediante prácticas opacas, conocidas únicamente por ellos mismos. Este tipo de interés del mercado interbancario de Londres (Líbor es el acrónimo de London Interbank Offered Rate) incide en billones de dólares de préstamos bancarios como hipotecas, derivados y otros productos financieros. Del mismo modo que el Euribor (acrónimo de Euro Interbank Offered Rate),  en la zona del euro suele ser el tipo básico de referencia para todo tipo de productos (derivados) como futuros, swaps y asimismo con frecuencia como tipo de referencia para el cálculo de hipotecas e imposiciones a plazo. Ambos, Euribor y Líbor son los precios básicos del dinero, los tipos de interés de referencia para los mercados financieros que se establecen de modo similar por unos grupos escogidos de los propios bancos. Para el Euribor, la determinación del tipo de interés se controla por una comisión de supervisión de la Federación de Bancos Europeos, mientras que la fijación del Libor la supervisa la Asociación británica de banca (la BBA en siglas inglesas). La gran diferencia es que el Líbor se calcula para 10 divisas diferentes que se utilizan en la City de Londres.

Pero, según el citado reportaje de The Wall Street Journal, los escándalos del RBS van aún más de las trampas con el Líbor. Según documentos publicados por las autoridades de Canadá, operadores (traders) del RBS formaban parte de una supuesta red que buscaba la manipulación de un yen variante del Líbor. No está clara la implicación de otros empleados u operadores del RBS en esas estafas; pero el pasado año el banco despidió cuatro empleados en Londres y en Singapur relacionados con  las actividades de las investigaciones sobre el Líbor que llevan a cabo las autoridades estadounidenses y británicas.

Todavía más. el RBS es responsable como otros  bancos británicos de la venta de los llamados “seguros de protección de pagos”; un seguro para cubrir los pagos comprometidos por quienes suscriben hipotecas o utilizan tarjetas de crédito en los casos de que pierdan sus empleos o caigan enfermos y no puedan hacer frente a esas deudas. Pero resulta que el RBS, un banco público gestionado como empresa privada, vendía este seguro a muchas personas que no necesitaban ese tipo de seguro; otra modalidad de estafas.

De ahí que no sea una ligereza o una hipérbole periodística afirmar como lo hacía el editorial del Financial Times (30/6/2012)  que la manipulación  de los tipos de interés de referencia para los mercados financieros muestra “el corazón podrido del sistema financiero”. Resulta que los grandes bancos hacen trampas también con los precios de referencia para toda la economía porque falsean los tipos de interés básico. No solamente han generado un casino financiero sino que no respetan las reglas que se imponen a sí mismos. Porque el consenso neoliberal vigente impone una libertad sin restricciones para los mercados financieros.-